martes, 9 de junio de 2009

LA IMPORTANCIA DE NO IR A VOTAR‏






Si no votas, no te quejes:
Falsedad de esta frase

1.- En diversas ocasiones el pueblo mexicano ha acudido a las urnas en busca de algún cambio para enderezar el rumbo del país. Jamás lo ha conseguido; se ha quejado de mil cosas que le perjudican y sus protestas han caído totalmente en el vacío.

2.- Acudir a votar por cualquier candidato, del partido que sea, significa que las cosas sigan absolutamente igual que hasta ahora. PRI, PAN, PRD, PT, P.Verde, PSD, CONVERGENCIA, etcétera, ven a México no como una patria, sino como un cuantioso botín. Los hechos así lo han demostrado una y otra y otra vez.

3.- Presentarse en las casillas vestido de blanco, de negro, de café o de anaranjado como señal de protesta, resulta infantil e ingenuo. No por eso los pillos de la política, que de políticos serios no tienen nada, van a estremecerse o a preocuparse. Su finalidad es legitimarse así sea con un solo voto.

4.- Hubo en la capital dos marchas de cientos de miles de personas vestidas de blanco en demanda de seguridad y no se logró que ésta mejorara a pesar de que las autoridades se comprometieron formalmente a eso. Por el contrario, de esos días a la fecha la delincuencia se ha incrementado y México ocupa ya el primer lugar en secuestros a nivel mundial. Esto, sin contar a la delincuencia de cuello blanco, es decir a la de los políticos.

5.- Acudir a las casillas y anular el voto tampoco sirve de nada. Por el contrario, esto refuerza el deplorable estado de la situación, pues al presentar la credencial de elector y luego cruzar la boleta electoral en el sentido que sea, le da legitimidad al proceso, que es precisamente lo que les interesa a los saqueadores del erario público disfrazados de políticos.

6.- La única protesta valedera, real, contundente y por supuesto visible, es la ausencia del ciudadano en los centros de votación. Una abstención masiva del pueblo mexicano que se refleje en las casillas para que éstas aparezcan desiertas, significa un repudio real, concreto y abierto contra quienes ocupan los puestos públicos y/o de elección popular, y que han tomado a la nación simple y sencillamente como fuente inagotable de riqueza personal. De ahí que el sistema político esté promoviendo desesperadamente el voto.

7.- En síntesis, no acudir a votar significa tener plena conciencia de todos los graves males que afectan al país, e implica también no hacerle el juego a una supuesta y sedicente democracia que en realidad no es sino el mas grave ejemplo de anarquía, desorden y desbarajuste económico, político y social.

2 comentarios:

León Toral dijo...

Si no votas, despues no te quejes de que las cosas no son como quieres.

No es de esta manera como se hacen las cosas. Hay que hacer marchas, bloqueos, huelgas generalizadas, apagones, boicots contra servicios y productos, etc.

Si el pueblo simplemente se queda de brazos cruzados y no se moviliza, la cosa va a seguir de mal en peor.

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, el anular nuestro voto es una manera de protestar, pacífica y silenciosa. El único problema es que para que estos parásitos se den cuenta de que no nos parece su manera de "gobernar", el abstencionismo, o en su defecto la anulación del voto, deberá ser de sobremanera (para que las elecciones se declaren nulas debido al abstencionismo más del 80, u 85% de los votantes debemos de llevarlo a cabo.) El problema reside, pues, en la organización de un abstencionismo mayor a nivel república. En fin, el día de las elecciones mi papeleta estará a favor de todos los partidos y con una leyenda que rece: "Pónganse a trabajar, parásitos pusilánimes."